En los últimos cincuenta años, ha cambiado mucho con respecto a la forma en que cuidamos a nuestros perros. Y aunque parezca más complicado, ha beneficiado enormemente a nuestros compañeros caninos. Un mejor cuidado de las mascotas no solo ha aumentado la esperanza de vida del perro, sino que también ha mejorado enormemente su calidad de vida.
Los veterinarios fomentan los exámenes físicos semestrales para que podamos ayudar a educar a los dueños de mascotas y abordar los problemas antes de que se agraven. Sin estas visitas, muchas cosas no se controlan y pueden ser perjudiciales para la relación entre usted y su cachorro. ¿Cuáles son algunos de los problemas más comunes que ven los veterinarios en estos casos?
No socializar a un cachorro lo suficientemente temprano
La mayoría de los cachorros deberían tener su primer cuidado preventivo alrededor de las seis a ocho semanas de edad, y para entonces, ya están aprendiendo a socializar. Es probable que los propietarios que tienen un enfoque más “práctico” para el cuidado de cachorros tengan algunos cachorros bien socializados. Estos cachorros se convertirán en perros adultos que tienen mejores probabilidades de no temer a los extraños y otros animales. La socialización temprana también puede minimizar otros comportamientos problemáticos como la agresión y la ansiedad.
Es importante tener en cuenta que su cachorro debe evitar las áreas donde han estado nuevos perros y otros animales hasta que el cachorro haya recibido al menos dos o tres de sus primeras vacunas. ¡Esto se debe a que enfermedades como el parvovirus pueden existir en un ambiente al aire libre hasta por seis años! Cuando los cachorros no han recibido todas sus vacunas y son llevados al patio de un vecino o al parque para perros local, corren un mayor riesgo de contraer la enfermedad.
No mantenerse al día con las vacunas anuales
Hablando de parvovirus, las vacunaciones anuales son extremadamente importantes. El sistema inmunológico de un perro es un poco diferente al de un humano, por lo que las vacunas anuales son necesarias para mantener una buena inmunidad contra ciertas enfermedades. Sin embargo, en el caso de la vacuna contra la rabia, algunas vacunas pueden ofrecer inmunidad hasta por tres años.
Puede ser fácil iniciar a su cachorro con un programa de vacunación de rutina y luego no repetir las vacunas una vez que sea adulto. Muchas de las enfermedades incluidas en la serie de vacunas de su perro pueden causar enfermedades graves y algunas de estas enfermedades pueden ser fatales.
Puede haber algunos casos en los que su perro ya no pueda recibir vacunas (por ejemplo, enfermedades inmunomediadas, anafilaxia grave), pero si su perro obtiene la aprobación de su veterinario, aumentar las vacunas de su perro anualmente también puede ayudar a proporcionar inmunidad de manada para los animales en su área, incluso sus propias mascotas. Un ejemplo es que los perros tienen vacunas disponibles para la influenza y la leptospirosis, mientras que los gatos no. Los gatos tienen el mismo riesgo de desarrollar diversas enfermedades caninas.
Sobrealimentar a un perro
Puede ser fácil para un perro tener sobrepeso u obesidad. ¡Lo que puede parecer un regalo inocente de nuestros propios platos puede causar muchos problemas! En comparación con la dieta estándar de 2,000 calorías para humanos, los perros necesitan mucho menos cada día: los perros de razas grandes pueden salirse con la mitad de eso, mientras que las razas de juguete solo pueden necesitar de 100 a 150 calorías por día. Entonces, si terminas dándole a tu perro de 4 kilos un pedazo de tu hamburguesa, ¡le has dado casi toda la asignación diaria de calorías en un bocado!
Los perros con sobrepeso son más propensos a sufrir problemas de salud como la diabetes mellitus. También tienen un mayor riesgo de desarrollar presión arterial alta, enfermedades cardíacas y enfermedades de las articulaciones como la artritis. ¡Al ayudar a su amigo peludo a perder el exceso de peso corporal, puede agregar uno o dos años más a su esperanza de vida! La nutrición y el ejercicio son los componentes principales para ayudar a su cachorro a perder peso, y su veterinario puede ayudarlo a crear un plan de pérdida de peso que sea seguro y efectivo.
No hay suficiente ejercicio
A la mayoría de los perros les encanta pasear o jugar con sus dueños. Después de todo, ¡son criaturas muy sociales! Pero la vida de un “adicto a la televisión” puede ser infeliz y puede aumentar el riesgo de tener sobrepeso. Cuando sea posible, intente programar unos diez minutos de juego una o dos veces al día. Esto puede incluir juegos de buscar o tirar de la cuerda. Algunos perros pueden incluso disfrutar jugando con juguetes interactivos para perros.
Las caminatas largas son lo mejor para los perros con mucha energía, pero si su horario no lo permite, puede ver si un miembro de la familia, vecino o amigo podría estar dispuesto a llevar a su cachorro a dar un paseo. También hay guarderías para perros que permiten jugar con otros perros y personas. Los parques para perros también son una excelente manera para que su compañero canino socialice y se divierta.
Descuidar la salud bucal
La boca de su perro es extremadamente importante. No solo necesita su boca para masticar y tragar alimentos, sino que también usa su boca para recoger artículos y jugar con juguetes. Al ignorar la salud bucal, su perro puede tener un mayor riesgo de desarrollar enfermedad periodontal. Esto contribuirá al mal aliento, el dolor bucal y la pérdida de dientes. En casos graves, los perros pueden desarrollar infecciones óseas de la mandíbula y las bacterias de la boca pueden viajar al corazón a través del torrente sanguíneo.
Idealmente, debes cepillarle los dientes a tu perro a diario. Si esto no es posible, considere cepillarse los dientes al menos tres veces por semana. Puede usar cualquier cepillo de dientes de cerdas suaves, pero asegúrese de que la pasta de dientes que haya comprado sea una etiqueta para perros. Las pastas dentales enzimáticas son particularmente efectivas y vienen en sabores deliciosos como ave o mantequilla de maní. Los enjuagues bucales y los masticables dentales también pueden ayudar a eliminar la placa y minimizar la acumulación de sarro.
La mayoría de los veterinarios también recomiendan profilaxis dental anual para eliminar la placa y el sarro debajo de la línea de las encías. Esto no es posible sin anestesia general, lo que significa que las limpiezas dentales “despierto” no son efectivas debido a la enfermedad que queda debajo de la línea de las encías. Las radiografías dentales también pueden identificar una enfermedad dental temprana antes de que ocurra la aparición de un absceso de la raíz del diente doloroso.
No se sienta mal si ha ignorado uno de los detalles de esta lista, ¡más vale tarde que nunca! Los dueños de mascotas que son proactivos con respecto al cuidado de su perro se benefician de un cachorro feliz y menos facturas del veterinario. La medicina preventiva, el ejercicio, la buena nutrición y la socialización pueden mejorar enormemente la calidad de vida de tu amigo peludo.