Los gatos son criaturas notoriamente independientes, por lo que puede ser difícil concebir que sufran algo parecido a la ansiedad por separación. Sin embargo, los gatos siguen siendo mascotas sociales que forman un sólido vínculo con sus dueños, y no les gustan los cambios. Por eso, cuando se producen cambios repentinos en el horario o la rutina de su dueño, el gatito puede sentirse abandonado.
Dicho esto, la ansiedad por separación de un perro puede ser mucho más fácil de detectar que la de un gato. Tu gato no ladrará ni destrozará la casa como represalia a tu ausencia, como podría hacer un perro.
¿Pueden los gatos sufrir ansiedad por separación?
Por supuesto que sí. Aunque no sea tan evidente como la de un perro, los gatos pueden estar muy apegados a sus dueños y mostrar signos de ansiedad por separación, así como de soledad y depresión.
Sin embargo, como los signos de estos sentimientos son mucho menos pronunciados en los gatos, es tristemente común que estas ansiedades pasen desapercibidas hasta que son mucho más graves. Algunos pueden pensar que los gatos no necesitan mucha interacción, pero esto no es cierto. Los gatos no son solitarios: necesitan atención y tiempo de juego para ser realmente felices y estar sanos.
¿Cuáles son los signos de la ansiedad por separación en los gatos?
Los principales signos de que su gato sufre ansiedad por separación son:
- Maullidos fuertes y excesivos
- Aseo y lamido excesivos
- Ensuciar la casa
- Pérdida de apetito o comer demasiado rápido
- Vómitos y diarrea
- Aferramiento
- Aislamiento
Puede que un gato no sea tan travieso como un perro a la hora de destrozar su casa, pero el comportamiento destructivo no es un signo infrecuente de ansiedad por separación. Pueden derribar cosas y arañar puertas o muebles.
También pueden orinar en su cama o en su ropa cuando no está. Aunque esto puede parecer un problema de comportamiento nacido de la venganza por haberte marchado, puede ser una forma de autocalmarse y dejar un rastro de olor para que sea más fácil para ti volver a ellos.
¿Qué causa la ansiedad por separación del gato?
Hay una serie de posibles causas de la ansiedad por separación del gato, que van desde cuestiones ambientales hasta cuestiones genéticas de salud, entre ellas
Genética
La genética de un gato puede influir en que sufra ansiedad por separación, así como depresión. En particular, los gatos muy nerviosos, como los birmanos y los siameses, parecen ser más propensos a estas condiciones. Desgraciadamente, cuando se trata de factores genéticos, no se puede hacer nada para cambiarlos, pero sí se puede ayudar a controlarlos proporcionándoles suficiente estimulación mental y ejercicio.
Destete precoz
Los gatos que fueron separados de su madre y hermanos demasiado pronto cuando eran gatitos pueden ser más propensos a experimentar ansiedad por separación. Lo ideal es no separar a un gatito de su familia hasta que tenga al menos ocho semanas de edad. Los gatitos huérfanos pueden tener el mismo problema. Otra causa común de la ansiedad de los gatos es la falta de socialización, que es especialmente importante entre las tres y las nueve semanas de edad.
Problemas de salud
Antes de considerar cualquier diagnóstico y tratamiento, es importante descartar cualquier problema de salud subyacente que pueda estar causando la ansiedad. Su veterinario sabrá qué comprobar, y los veterinarios nos explican que esto puede incluir hipertiroidismo, una infección del tracto urinario, problemas de piel, parásitos, alergias o enfermedades intestinales.
Falta de estímulos o cambios bruscos
Cuando los gatos se aburren o tienen poco tiempo de juego, pueden apegarse demasiado a sus dueños. Además, los cambios importantes, como la muerte de un miembro de la familia o de otra mascota, una mudanza, un nuevo bebé o un cambio en la rutina o en el horario de trabajo, pueden causar ansiedad a su gato.
Los gatos también son muy perceptivos con respecto a tus emociones, por lo que cuanto más ansioso estés antes de salir de casa, mayores serán las posibilidades de que la ansiedad de tu gatito también aumente.
Cómo ayudar a su gato con su ansiedad por separación
Una vez que un veterinario haya diagnosticado que su gato tiene ansiedad por separación, le recomendará una vía de tratamiento. El tratamiento de la ansiedad felina puede incluir modificaciones del comportamiento y, a veces, incluso una intervención médica.
También puede recurrir a la experiencia de un especialista en comportamiento de mascotas, así como considerar lo siguiente:
Proporcionar un entorno estimulante
A los gatos les encanta pasar el rato en lugares altos, ya que les hace sentirse seguros, así que considere la posibilidad de conseguir un poste de rascado vertical o un árbol para gatos. Siempre que todos estén a salvo, también puede instalar un comedero para pájaros fuera de una ventana para que su gato lo observe. Los juguetes, los comederos de rompecabezas y las cámaras para mascotas también son herramientas útiles para mantener a su gato entretenido y sentirse conectado.
Asegúrese de que tenga mucho tiempo de juego
Lo más fácil es establecer una rutina para programar un tiempo de juego con su gatito 2-3 veces al día para mantenerlo ocupado y divertido. Asegúrese de incluir una variedad de juguetes para gato y asegúrese de que su deseo de cazar presas quede satisfecho en sus sesiones de juego.
Proporciónele un refugio tranquilizador
A los gatos les encanta sentirse encerrados en un lugar acogedor y cálido, y esto reduce su ansiedad, ya que pueden descansar y relajarse mientras se sienten seguros. Una de las mejores maneras de proporcionarle esto a su gatito es conseguirle una cueva para gatos y encontrarle un hogar en algún lugar tranquilo pero que esté en el centro de la casa. Las cuevas para gatos son camas autocalentables y acogedoras que proporcionan el escondite perfecto para que su gato se sienta tranquilo y calmado.
Si tiene alguna duda sobre el comportamiento de su querido felino, es importante que consulte a su veterinario para descartar cualquier cosa grave. A partir de ahí, puedes elaborar un plan firme para ayudar a tu gatito a superar su ansiedad y sentirse feliz y sano de nuevo.