¿Te sorprendería saber que entre el 75 y el 80% del cuerpo de tu peludo es agua? El agua está contenida en cada célula de cada órgano, donde baña las articulaciones, amortigua y nutre el cerebro, rellena la piel y transporta nutrientes a los tejidos. Para mantenerse sano, un perro necesita cada día aproximadamente una onza de agua por cada kilo de peso corporal, lo que equivaldría a unos dos vasos de agua para un cachorro de 4,5 kilos.
La mayoría de los perros consumen suficiente cantidad de este líquido esencial por sí solos, pero ¿qué ocurre si su perro no puede -o no quiere- beber tanto como debería? Puede deberse a muchas razones, como la imposibilidad de acercarse a su bowl a causa de una lesión, una enfermedad o factores del entorno. Sea cual sea el motivo, no beber suficiente agua puede ser peligroso y provocar una deshidratación que puede enfermar al perro.
Este año, exploramos algunas formas inteligentes de mantener hidratado a un perro que no bebe lo suficiente por sí mismo, ya sea en pleno verano o en cualquier momento que lo necesite. Pero antes, veamos qué ocurre cuando nuestros amigos peludos se deshidratan.
Cómo puede afectar la deshidratación a los perros
La deshidratación es una enfermedad grave que puede afectar a cualquiera, incluido tu amigo peludo. La deshidratación grave puede resecar la piel y las membranas mucosas, lo que permite la entrada de microorganismos infecciosos, inhibir funciones críticas como la digestión y la eliminación de residuos, lo que provoca la acumulación de toxinas en el organismo, y contribuir a la desnutrición. Pero también puede provocar trastornos aún más graves, como el deterioro de la función del sistema nervioso central, anemia e insuficiencia renal, hepática o de otros órganos.
La sed normal de nuestro cuerpo suele mantenernos consumiendo suficiente agua para garantizar que nada de esto ocurra, pero cuando hace calor o el acceso al agua es difícil, la deshidratación puede producirse rápidamente en humanos y perros.
¿Cómo puede proteger a su perro? Conociendo los signos de deshidratación y rehidratándolo. Algunos signos de deshidratación precoz son:
- Jadeo excesivo
- Sequedad de nariz, boca y encías
- Membranas mucosas pegajosas
- Encías pálidas
- Movimientos lentos o perezosos
- Respuestas o actividad mental apagadas
Si observa alguno de estos síntomas en su perro, hidrátelo inmediatamente y llame al veterinario.
La mejor forma de evitar que su perro se deshidrate es que siga bebiendo agua, pero a veces esto puede resultar complicado. Echa un vistazo a los siguientes consejos para hidratar fácilmente a tu perro.
Añada humedad a su comida
La mayoría de los perros comen croquetas con un bowl de agua al lado. Suelen beber agua después de comer y varias veces al día. Si tu cachorro come pero no bebe de forma constante, puedes asegurarte de que beba más agua añadiendo un poco a su comida, ya sea croqueta o comida húmeda. También puede ser útil cambiar la comida seca por comida húmeda o mezclar ambas, ya que la comida húmeda tiene un mayor contenido de humedad. Añadir un par de cucharadas soperas de H2O a cualquier alimento facilita la hidratación del cuerpo del perro.
Añada sabor al agua
Si el agua sola no le interesa a su cachorro, puede sentirse tentado a beberla con complementos como caldo o zumo exprimido de frutas aptas para cachorros. En el caso del caldo, asegúrese de utilizar variedades bajas en sodio o sin sodio, o prepare su propia versión sin sal. Compruebe también si el caldo comprado contiene cebolla o ajo, ya que ambos potenciadores del sabor son tóxicos para los perros.
Los caldos de huesos caseros son fáciles y económicos de preparar. Basta con echar unos huesos de carne o de ave en una olla grande con agua y cocerlos a fuego muy lento durante unas 24 horas. Una olla de cocción lenta es un método seguro y sin preocupaciones. Elige huesos de codillo si es posible, para aumentar el contenido de colágeno. Para hacer caldos de carne, siga el mismo proceso, utilizando sólo trozos de carne o un pollo entero. El tiempo de cocción a fuego lento es más corto, sólo un par de horas. Una ventaja añadida es la carne, que puede ofrecerse como golosinas o aderezos para la comida.
Déle fruta a su perro
Dele a su mascota trozos de frutas llenas de agua, como la sandía y las fresas, o verduras como los pepinos, que contienen un 98% de agua. Hay muchas frutas y verduras jugosas que son seguras y deliciosas para los perros, como las crujientes manzanas y las dulces rodajas de naranja. La fruta también es una buena opción como aderezo de la comida de los cachorros, pero recuerde que contiene azúcar junto con su saludable agua. La moderación es lo mejor, como con cualquier golosina.
Si tú y tu peludo estan planeando un viaje por carretera o una excursión, lleva mucha agua, pero no olvides que la fruta es otra forma estupenda de hidrataros. Mete una manzana o dos en la mochila.
¡Congélala!
Perseguir cubitos de hielo por el suelo y masticarlos ruidosamente cuando los “atrapan” es la idea que tienen muchos perros de pasárselo en grande. Como golosinas hidratantes, no hay nada mejor para estos cachorros. ¡pequeños trozos de otras frutas y verduras congeladas en los cubos pueden ser el premio por masticar hasta el centro!
En los calurosos días de verano, ¡no hay nada como una golosina congelada para refrescarse!
O prueba con batidos caseros congelados o fríos, repletos de ingredientes ricos en antioxidantes, como la calabaza o los arándanos.
Cambiar sus fuentes de agua
Los perros pueden rechazar un tipo concreto de bowl, como los de acero inoxidable, cristal o cerámica, por diversos motivos. Los bowl sucios o el agua con babas pueden no ser del agrado del perro, que se negará a beber. Lo mismo ocurre con el agua: algunos cachorros prefieren el agua filtrada al agua del grifo o incluso embotellada. Si a su perro no le gusta su agua habitual, pruebe a cambiar el agua o el bowl, o incluso el lugar, para ver si así se anima a beber.
Otra opción es una fuente de agua de interior que fluya constantemente y limpie el agua, o incluso un juego divertido con la manguera o el aspersor en el exterior puede atraerlo. Mantenga limpios los bowl de agua y asegúrese siempre de que su perro tiene acceso a agua fresca, ya sea colocándolos cerca de ellos o en distintos lugares.
¿De viaje? Pruebe distintas marcas de botellas de agua y bowls de agua de viaje para ver qué le gusta más a su cachorro. Las botellas de agua conbowlintegrados en la parte superior también son una buena opción para una hidratación rápida.
Puede que no pensemos demasiado en si nuestros cachorros beben suficiente agua para mantenerse sanos, y los primeros signos de deshidratación pueden ser sutiles. Controlar la ingesta de agua puede proporcionar información importante sobre si tu peludo necesita que lo convenzas con estos u otros incentivos.